La decisión fue tomada debido a que no tenía antecedentes penales. Sin embargo, le impusieron una restricción de acercarse a menos de 200 metros del menor y su familia.
Ayer, el Juzgado de turno de Goya decidió la excarcelación de Guido Gómez, el sujeto que golpeaba a su hijastro por no vender churros. La orden fue tomada por el juez, Darío Ortiz.
Gómez fue acusado de azotar a manguerazos a su hijastro, a quien obligaba a vender churros en la calle y no debía volver hasta que no quedara ninguno. El caso se dio a conocer el pasado 31 de octubre, cuando la víctima huyó de su hogar tras una violenta paliza de parte de su padrastro.
Se supo que, tras ser denunciado por el maltrato infantil, Gómez se disponía a viajar al Chaco, de donde es oriundo. Teniendo en cuenta esto, la Justicia emitió una orden de captura y, horas después, fue detenido. Sin embargo, el padrastro presentó mediante su abogado una eximición de prisión.
Además, se dio a conocer que el menor tiene otros tres hermanos, que también eran obligados a trabajar y que recibían el mismo castigo si se resistían a hacerlo.
Finalmente, ayer confirmaron su liberación debido a que estaba acusado de "provocar lesiones leves" y que no posee antecedentes penales.
A pesar de esto, Gómez quedó supeditado a la causa y el Juzgado de Familia determinó una restricción de acercarse a menos de 200 metros de toda la familia de la víctima. Además, deberá acudir cada semana a la sede policial a firmar, no deberá salir de la ciudad o mudarse, sin consentimiento del juez en turno.
