Pasó de un promedio de 30 por fin de semana a 50. Los motociclistas son los que más ingresan. La ingesta de alcohol, una constante.
El Hospital Escuela General San Martín tiene una alta demanda que se acrecienta durante los fines de semana, lo que lleva al nosocomio a trabajar a “cama caliente”. El incremento en la cantidad de heridos en siniestros viales y en riñas que ingresan al área de Emergencias -de viernes a domingo especialmente- es de casi el doble en los últimos meses. Las áreas de Traumatología y Neurocirugía son las que tienen más demandas. “En las últimas semanas se incrementó la cantidad de accidentados y de lesionados en agresiones que son asistidos. Ingresan entre 30 y 50 por fin de semana”, señaló a Norte de Corrientes el director del centro de salud, Salvador González Nadal. El incremento duplica a los registrados a mediados de año cuando se mantenía entre 25 y 30 heridos. “La mayor cantidad de heridos en siniestros viales son motociclistas que andaban en motos de baja cilindrada. La de 110 cc es la que más incidencia tiene”, dijo el funcionario. Consideró además que este incremento en la cantidad de heridos está relacionado “a la ingesta de bebidas alcohólicas acompañada de conducción irresponsable” y “el incremento del parque automotor y la facilidad para adquirir una moto”.
De acuerdo al mapa de siniestralidad que realiza el hospital, los lugares de la ciudad donde se registran los números más altos de siniestros viales son las avenidas, liderando Maipú y Armenia. Siguen la Independencia, la Ruta Provincial Nº 5 y la avenida Cazadores Correntinos.
Más del 80% de las víctimas por accidentes de tránsito que ingresan al hospital son motociclistas y cada año son más de 3 mil las personas asistidas por esta causa. Indican que la mayoría de los casos corresponde a hombres de unos 30 años, que conducen sus vehículos sin casco. Explicó que el centro de salud tiene un alto índice de giro cama (medida del número de egresos que en promedio comprometieron el uso de cada cama disponible). “Casi siempre estamos en la totalidad del hospital con las camas ocupadas producto del embudo que genera ser el centro que atiende el trauma y la neurocirugía”, señaló.
El hospital es polivalente, no solamente atiende traumatología y neurocirugía, también hay oncología, clínica médica, endocrinología. “Es un hospital de mucha consulta”, ratificó.
El director consideró que este año “fue muy duro” debido a la crisis económica. “La inflación produjo aumentos de precios y el hospital tiene pacientes graves de altos costos. Las prácticas de neurocirugía son costosas”, dijo, y agregó que la situación “afecta a todo lo que está dolarizado”, como jeringas y medios de contraste para radiografías, entre otros. El año pasado, la asistencia a accidentados demandó más de 7 millones de pesos, y por el incremento de los costos este año fue mucho mayor.
OBRAS
Las obras centrales de la terapia intensiva continuarán el próximo año. El área está dividida en dos espacios, uno nuevo y otro que fue remodelado. En este último estará ubicado el sector de Neurocirugía y Unidad Coronaria, donde falta terminar las conexiones eléctricas de las habitaciones, y la jefatura de UCO (área asistencial del hospital dotada de los medios técnicos y de los recursos humanos).
Además, comentó que se está llevando adelante la refacción del Auditorio del hospital. Explicó que se realizan con fondos de la Universidad Nacional del Nordeste (Unne) y el proyecto consiste en refacción integral que incluye los techos, las butacas, los baños, la creación de rampas de acceso para discapacitados, una moderna iluminación y un sistema especial antiincendios.