Los protagonistas explicaron a los agentes policiales que uno de los trabajadores les dio permiso para que se llevaran las piedras a sus casas. Pertenecen a una obra de refacción integral.
El insólito robo de adoquines del
cementerio San Juan Bautista ocurrió en base a una confusión, según explicaron
desde la Municipalidad de Corrientes. Los carreros que protagonizaron la
sustracción explicaron a los efectivos policiales que se llevaron los elementos
de la construcción porque un maquinista de la misma obra de refacción integral
les dijo que podían utilizarlos.
Se trata de adoquines de la construcción
de una nueva playa de estacionamiento en uno de los cementerios de la ciudad de
Corrientes, en el barrio Galván, que se suma a otras refacciones que comenzaron
a principios de año.
Obras similares se realizan en el
cementerio San Isidro Labrador, en el barrio Laguna Brava.
Según explicaron a El Litoral desde la
Subsecretaría de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad de Corrientes, los
adoquines fueron encontrados por la policía en manos de unos carreros, quienes
aseguraron que el maquinista de la obra los autorizó a llevarlos. El Litoral






