Como ya es costumbre, la imagen
peregrina de María de Itatí salió al encuentro de los peregrinos, que se
produjo a unas tres cuadras de la Basílica.
Las imágenes de las advocaciones
de María de Itatí y María del Rosario se colocaron juntas, portada por los
peregrinantes, para realizar el último tramo hacia el Santuario.
El vicario parroquial, padre
Derlis Sosa dio la bienvenida al padre Miguel Gómez, asesor de la Sociedad de
Peregrinos, y a los miles de caminantes, que a viva voz entonaron su himno.
Luego de recibir la bendición, en
el atrio de la Basílica, y tras el ingreso de las sagradas imágenes, los
peregrinos siguiendo la tradición, ingresaron de rodillas hasta el presbiterio,
besando el piso como signo de estar en un lugar sagrado, a los pies de María de
Itatí.
Desde la organización agradecieron por el operativo policial ya que todo se llevó adelante con total normalidad.