Con dos condenas a tres años en
suspenso para Walter Bruquetas y Marcelo Mayer, y la absolución del capataz de
la obra siniestrada Carlos Valenzuela, un sabor amargo recorrió a los
familiares de las víctimas, cuando finalmente concluyó el juicio por el derrumbe
trágico del 22 de marzo de 2012, que le costó la vida a ocho obreros de la
construcción y heridas graves a otros tres.
"Sentir esa burla, a cara
burlona de Marcelo Mayer. Eso duele mucho. Cuando fueron a un cuarto
intermedio, ya tuvimos la sensación de que estaban negociando", expresó
Rosa Urbina, en diálogo exclusivo con Radio Dos. Rosa sostuvo sentirse "vacía
y resignada"
“Es una vergüenza la justicia que
tenemos en Corrientes”
"Uno esperaba una respuesta,
un alivio, pero la Justicia no se portó a la altura de las circunstancias.
Tengo la misma sensación de hace 10 años", resaltó la mamá de Diego
Rodríguez, uno de los obreros fallecidos en el derrumbe ocurrido en septiembre
de 2012.
"Nuestra causa desde el inicio estuvo envuelta en la corrupción y ayer quedó demostrado que todo se puede comprar", subrayó.